24 dic 2010

Felices fiestas.

Añoranza, melancolía, tristezas y alegrías.  Durante esta época el corazón del hombre se ve cargado de miríada de sentimientos, tantas veces conflictivos entre ellos, existentes en nosotros desde siempre, pero que alrededor de estas fechas se amplifican y tienden a sobrecargarnos. 

Por otro lado, se presenta, en otros tantos, un aparente vacío sentimental, en donde las fechas “ya no tiene el mismo efecto de antes” y que, por variadas razones, en cada uno de ellos distintas, parecen drenar de significado estos días.

Sea como fuere tu caso particular, con el espíritu navideño como motor de empuje durante estas fechas o siendo una duda, un fantasma del pasado que parece no dejarte en tranquilad; te insto solamente a una cosa, algo que en días presentes pareciera una rareza, algo atípico y que al presentarse puede dejar en otros dudas acerca de tus intenciones, te insto a que despiertes tu lado humano.

No hesites en hacer esa llamada, mandar ese mensaje, dar ese abrazo, devolver esa sonrisa, extender ese saludo o dedicar ese pensamiento, porque, por sobre todas las cosas, en estos días tienes la excusa perfecta para poner en práctica la a veces anticuada idea de que el hombre, por naturaleza, encamina sus acciones hacia el bien.

Feliz fiestas para todos.

Que la pases de lo mejor.

0 comentarios:

Publicar un comentario